lunes, 23 de enero de 2017

Fragmentos de terror... TONOS DE CELULAR


La tecnología nos brinda muchas novedades y variantes para personalizar nuestros celulares... aunque no todas sean muy seguras...


TONOS DE CELULAR

1
Tenía una semana que Reynaldo había bajado ese tono a su celular, consistía en un lamento prolongado y hueco, seguido de una voz que decía unas palabras en otro idioma. Lo había puesto para que sonara en las notificaciones, por lo que gran parte del día lo escuchaba: chats, mensajes, llamadas, redes disponibles. Como amante del terror estaba fascinado con su notificador. Inclusive varios de sus compañeros de la universidad le habían pedido que les mandara el vínculo de donde lo había descargado. Cosa que Reynaldo no haría, pues si algo quería era tener un sonido diferente al de los demás.
Estaba en la computadora haciendo una tarea cuando su celular emitió el lamento, era la segunda vez que lo hacía en menos de un minuto. Volteó a verlo, pero resistió y siguió tecleando su texto. Era una tarea de Estadística y datos, debía de mandarla esa misma noche. El celular sacó de nuevo el lamento un par de veces. Reynaldo ya no resistió, jaló su aparato y le quitó el protector: su pantalla solo mostraba la hora. No había ningún aviso.
                        —      ¿Pero qué ha pasado con este chunche? —se dijo mientras verificaba que no hubiera realmente ningún aviso—. Ya van varias veces que suena sin motivo. ¿O será el sonido que bajé? —golpeteó la caratula—. No, no lo creo.
Dejó su aparato y se sumergió de nuevo en la tarea. Estuvo así una hora más hasta que acabó y se la mandó por correo al profesor. Después apagó la computadora y se recostó. Estaba ya quedándose dormido cuando el lamento de su celular lo despertó. Sonó tres veces seguidas. Había olvidado silenciarlo. Era adicto a la tecnología, pero el sueño era sagrado para él. Revisó el aparato y una vez más, no había notificaciones.