lunes, 29 de julio de 2019

Fragmentos de terror... CACERIA



Aunque sean más caras valen la pena...




Cacería 

La subí a la altura de la calzada Tlalpan y la calle Coruña, después de estar dando varios rondines y viéndolas a todas, hasta que supe que ella era la indicada. Llevaba un vestido rojo tan pequeño que se le enmarcaba el inicio de sus nalgas; tenía unos senos medianos muy firmes, acompañados de una cintura pequeña y una cadera de infarto. Lo bueno de aquella zona era que las putas eran riquísimas y hermosas, aunque más caras, cosa que en realidad no me importaba pues al final siempre recuperaba el dinero, solo era cosa de encontrar a la chica correcta. Le pregunté qué cuanto cobraba solo por mero trámite.

  — Seiscientos, papi —me respondió—. Una hora, incluye relaciones ilimitadas, oral, todos desnuditos, un rico masajito y trato de novios.